Káiser, con tilde y, como apodo, sin resalte tipográfico

EAU AUTOMOVILISMO G    El sustantivo káiser se escribe con tilde por tratarse de una palabra llana terminada en consonante distinta de -n-s, tal como lo muestra el Diccionario de la lengua española y, como apodo, se escribe con mayúscula inicial y sin resalte tipográfico.

    Con motivo del accidente sufrido por Michael Schumacher, en los medios pueden leerse frases como «El ‘Kaiser’ sufrió un duro golpe en la cabeza tras perder el control de sus esquís», «El ‘kaiser’, de 44 años, se retiró de la Fórmula 1 el año pasado tras un regreso de 3 campañas con Mercedes» o «El Kaiser está en coma debido a las graves heridas en la cabeza».

    De acuerdo con la Ortografía de la lengua española, la ka se emplea actualmente en español, en cualquier posición, en la escritura de numerosos préstamos de muy diverso origen que contienen esta letra en su grafía original, como en chikunguña o kamikaze, palabras que deben adaptarse al sistema de acentuación gráfica de nuestro idioma.

    Por otro lado, los apodos, que se escriben con mayúscula inicial, no necesitan de resalte tipográfico, excepto cuando aparecen entremetidos del nombre de pila y el apellido, en cuyo caso se escribe con resalte tipográfico, es decir, en cursiva si el cuerpo del texto principal está en redonda o viceversa (ejemplo: Ernesto Che Guevara), entre comillas (ejemplo: Ernesto «Che» Guevara) o, en última instancia, entre guiones bajos (ejemplo: Ernesto _Che_ Guevara). En textos manuscritos, el resalte tipográfico consiste en entrecomillar únicamente con comillas inglesas (ejemplo: Ernesto «Che» Guevara).

    Por lo tanto, en los ejemplos anteriores habría sido preferible escribir «El Káiser sufrió un duro golpe en la cabeza tras perder el control de sus esquís», «El Káiser, de 44 años, se retiró de la Fórmula 1 el año pasado tras un regreso de 3 campañas con Mercedes» y «El Káiser está en coma debido a las graves heridas en la cabeza».

    Además, el nombre Michael Schumacher se pronuncia aproximadamente /máikel shumája/, donde el dígrafo sh produce un sonido similar al que se utiliza para imponer silencio, como es lo normal en su lengua de origen, el alemán.